Nivel dos- Es una ruta sencilla pero muy bonita que recorre algunos lugares de gran belleza y aglutina elementos etnográficos, naturales y paisajísticos de gran interés. Las vistas de las moles rocosas de la sierra del Amboto y el recorrido por las distintas zonas de bosque con hayas centenarias, robles y abedules, son dos de los principales encantos de esta ruta, que transita por uno de los zonas más emblemáticas de Bizkaia llegando al Santuario de Urkiola y terminando en el Mirador de las Tres Cruces.

Quedaremos en el parking del otro lado de la carretera frente al Santuario, desde donde comenzamos la ruta por la pista que parte junto al cartel de la ruta y por la pista asfaltada llegamos a la bifurcación del centro de interpretación ”Toki-Alai” y continuamos por la pista de la derecha. 

El camino prosigue por las faldas del Saibi txiki hasta la base de la cima, donde nos encontramos los indicadores para iniciar la ascensión de 300 m que nos separan de la cruz, Ascendemos por una ladera herbosa y llena de hoyos, que nos recuerdan las bombas y trincheras de la batalla que se dió en la cumbre. 

En la alto del Saibigain (954 m) una cruz conmemora a los soldados que murieron en la guerra civil en las faldas de esta montaña, dos buzones y una mesa que nos ayuda a interpretar y poner nombre a los montes que nos rodean. La vista de la sierra del Amboto y de los valles es magnífica. 

Retrocedemos hasta la pista y pronto nos desviamos campo a través, para internarnos luego en una zona boscosa que nos acompañara hasta el area recreativa de Aldazitala, Algunos tramos del bosque son zona de repoblación de hayas que han combinado con roble americano para que las hayas crezcan a su sobra. Esta es otra de la zonas más agradables del recorrido.

Cruzamos la carretera y tomamos un tramo de pista hasta el desvío que se adentra en una campa con numerosas hayas dispersas o formando pequeños grupos. Hay que prestar atención a las balizas para orientarse, ya que no hay camino visible. Pronto llegamos a la ermita de Santa Apolonia 

Popularmente conocida como “Santutxu” la ermita se sitúa en la ladera sur de Urkiolamendi, en medio de un hayedo trasmocho. en ella se detenían los peregrinos que iban al Santuario para prepararse la penitencia antes de llegar al mismo, y en numerosas ocasiones el resto del camino se hacía descalzo. 

Desde la ermita surge una una calzada hasta el Santuario con un paseo de unos 200 metros. 
Visitamos el Santuario, uno de los más venerados de la provincia. Se trata de un edificio inacabado de estilo neomedieval que se comenzó a construir en 1899 y se consagró en 1933.

Este edificio, junto con un pequeño campanario, que se alzó en 1870, la casa rectoral, el antiguo hospital y la hospedería, conforman el conjunto religioso que se complementa con dos antiguas y pequeñas ermitas, la del Santo Cristo y la de Santa Polonia, un vía crucis y calvario construido en 1943, y el pequeño cementerio del barrio rural. 

Desde el Santuario nos encaminamos al mirador de las tres cruces. Pasamos junto a la Nevera que servían para conservar en su interior la nieve caída durante el invierno. De esta manera, las poblaciones circundantes podían abastecerse de hielo durante un período de tiempo más largo.. 

Continuamos por la pista que atraviesa un hayedo y sigue el viacrucis hasta llegar al mirador, Es impresionante la panorámica sobre el desfiladero de Atxarte y toda la zona de Durangaldea. Se pueden ver la mayor parte de las peñas del Duranguesado: Mugarra. Untzillaitz, Aitz-txiki, Alluitz, Anboto, Eskubaratz, Leungane y Artatxagan entre otros.